En Venezuela todo viene cambiando. Las ciudades se llenan de una reactivación comercial evidente. Nuevos «emprendimientos» inundan el tejido social. Comienza una seguidilla de grandes conciertos de artistas internacionales. Algunas aerolíneas internacionales retoman sus vuelos, suspendidos desde la «experiencia Guaidó» en 2019. Influencers visitan el país y constatan una realidad muy diferente a la de la crisis humanitaria. Los ingresos del venezolano común han mejorado gracias a ingresos no petroleros, como las remesas desde el exterior, la activación de otros negocios, como el oro, las criptomonedas y ciertos sectores comerciales.
La tasa mensual de inflación de Venezuela en marzo se ubicó en 1,4 por ciento, la más baja en una década, muy lejos de la hiperinflación que hasta hace poc...
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