Fue en Montevideo, en una reunión con empresarios uruguayos en el World Trade Center, en octubre de 2013, a apenas un mes de haber asumido el gobierno, cuando el presidente Horacio Cartes pronunció la célebre frase que definió su plan para atraer inversionistas extranjeros: “Paraguay es fácil, es como esa mujer bonita”.
La expresión despertó la indignación de los colectivos de mujeres, que lo acusaron de machista y retrógrado. Cuatro meses después, en febrero de 2014, en otra reunión con empresarios, esta vez de la Confederación Nacional de la Industria de Brasil, en Asunción, les dijo en su propio idioma: “Usen e abusen do Paraguay, porque na verdade é un momento inacreditavel de oportunidade”.
Aparte de escandalizar a las feministas, las pintorescas frases del mandatario paraguayo ...
Artículo para suscriptores
Hacé posible el periodismo en el que confiás.
Suscribiéndote a Brecha estás apoyando a un medio cooperativo, independiente y con compromiso social
Para continuar leyendo este artículo tenés que ser suscriptor de Brecha.
¿Ya sos suscriptor? Logueate