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Un paso adelante

La justicia tarda pero llega, un aforismo que puede aplicarse al tribunal chileno que procesó a dos oficiales por la desaparición en 1973 de dos refugiados uruguayos. En Uruguay, en cambio, la justicia tarda y no llega.

Juan Angel Cendán Almada, detenido el 12 de setiembre de 1973 y Alberto Fontela Alonso, detenido el 12 de setiembre de 1973

En el primer día de la dictadura de Augusto Pinochet, el 12 de setiembre de 1973, cuando aún humeaba el Palacio de la Moneda por el bombardeo del 11, un capitán de artillería al mando de un contingente fuertemente armado lanzó una redada contra uruguayos y brasileños exiliados. En el camión que se detuvo en la comuna de Vitacura, Santiago, viajaban 20 prisioneros. En una casa de la calle Espoz apresaron a dos uruguayos, Alberto Fontela y Juan Ángel Cendán, y a la ciudadana británica Anne Winifred Bicheno Armour, compañera de Fontela, embarazada de cinco meses.

Todos los prisioneros fueron trasladados a la Escuela Militar Bernardo O’ Higgins e interrogados por personal militar de inteligencia. Los cadetes gritaban reclamando que los mataran a todos. Cerca de la medianoche, junto con un b...

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