«Yo le dije: “Eduardo, esto es muy serio, yo voy con ello, pero esto es muy delicado y es demasiado burdo”.» Quien habla es Antonio García Ferreras, director del canal de televisión La Sexta y animador de uno de sus programas estrella, el periodístico Al rojo vivo. Su interlocutor es el comisario José Manuel Villarejo, símbolo, si los hay, del Estado profundo español y sus alcantarillas. Y Eduardo es Inda, un periodista de extrema derecha conocido por ser un consuetudinario fabricante de fake news. Villarejo y Ferreras están compartiendo un almuerzo con otro alto jefe policial, José Luis Olivera, el empresario Iván de la Joya, socio de Villarejo vinculado a multitud de casos de corrupción, y Mauricio Casals, uno de los principales ejecutivos de Atresmedia, corporación propiedad del Grupo ...
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