Son muchas las instituciones de enseñanza privada que desde la llegada del covid-19, y aun antes de saber a cabalidad cómo afectaría sus cuentas, resolvieron enviar funcionarios al seguro de paro. Tanto para el Sindicato Nacional de Trabajadoras y Trabajadores de la Educación Privada como para varios docentes, la medida puede ser comprensible en instituciones de bajos ingresos, pero no en las que se encuentran en barrios privilegiados y tienen cuotas que pasan los 30 mil pesos por mes.
Entre los tantos
trabajadores que se han visto afectados por las medidas tomadas a raíz de la
llegada del coronavirus a nuestro país, se encuentran los de la educación
privada. Según los datos del Banco de Previsión Social (Bps), en marzo recibieron de este sector
2.331 solicitudes de envío al seguro de ...
Artículo para suscriptores
Hacé posible el periodismo en el que confiás.
Suscribiéndote a Brecha estás apoyando a un medio cooperativo, independiente y con compromiso social
Para continuar leyendo este artículo tenés que ser suscriptor de Brecha.
¿Ya sos suscriptor? Logueate
