El poder de la imaginación infantil llega a zonas indefinibles con el célebre
reino del revés construido por María Elena Walsh. Sin embargo, mientras la
fantasía bordea la canción, el lenguaje y los objetos más cotidianos desfilan
en su letra. Algo análogo sucede en Lúser, novela bipartita que desafía
estructuras para dejar una profunda reflexión sobre el ser situado en un
contexto espaciotemporal definido. Si en la canción de Walsh “los gatos no
hacen miau y dicen yes”, en la obra de Cecilia Pouso los árboles –o, mejor
dicho, uno en particular– cobran vida para testimoniar sus percepciones y
sentimientos. Con todo, cabe preguntarse hasta qué punto esto compromete el
principio de realidad que tanto preocupa al narrador hacia el final del libro.
¿Qué es la realidad? ¿Cuál es nuestro lugar ...
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