En el actual Ejecutivo, el relacionamiento de Uruguay con el mundo está signado por la «diplomacia presidencial», en la que el papel del canciller, Francisco Bustillo, es mínimo. Impericia, arrogancia, desconocimiento de la realidad regional y mundial e, incluso, berrinches personales son algunos de los conceptos con los cuales la oposición y algunos expertos definen la diplomacia presidencial. Lo cierto es que el presidente de la república, Luis Lacalle Pou, ha logrado tensionar al Mercosur al punto de aislar a su gobierno de los mandatarios con los cuales tiene afinidad ideológica: el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, y el de Paraguay, Mario Abdo Benítez.
Meses atrás, en la reunión de presidentes por el pacto regional, Lacalle Pou reclamó la libertad para firmar acuerdos comercia...
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