Desde Córdoba, Andalucía
Yo tendría 6
o 7 años. Julio Anguita vivía en el edificio de
enfrente al nuestro, en un humilde barrio obrero de la Córdoba de principios de
la década del 80. Mi padre y él paseaban durante horas con las manos en la
espalda, se paraban cada dos pasos, y yo me desesperaba y me aburría. Se metían
en un viejo café llamado El Cisne Verde hasta las tantas y los hijos de Julio,
nosotros y otros tantos jugábamos sentados en el suelo hasta bien tarde en las
noches de verano.
En el barrio se notaba que algo
pasaba, que la gente humilde estaba empoderada. Yo no sabía nada del mundo de
esos adultos con barbas enormes que no paraban de fumar, pero me gustaba pensar
que el alcalde vivía en nuestro barrio, que era el vecino de un barrio humilde
y amigo de mis padres. Eso ...
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