En esto de abrazar a los que llegan, Uruguay es demasiado permisivo en sus controles migratorios y eso favorece algunas prácticas delictivas, advirtió la semana pasada un experto extranjero de visita por nuestro país. Por su parte, una investigación local confirma que cada vez son más las dominicanas en Uruguay que piden ayuda para salir de los círculos de trata dentro de sus comunidades, verdaderos guetos caribeños en los que conviven con sus explotadores. Mientras, la ley antitrata ya tiene media sanción y depende ahora de Diputados.
Muchos se refieren a la trata de personas1 como la esclavitud del siglo XXI, y no le erran. En la década del 90 Uruguay era identificado como un país de origen del tráfico sexual de mujeres, particularmente hacia España o Italia. A partir de las investiga...
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